Para ello, necesitamos:
- Bolitas de fieltro rojas y verdes
- Pistola de pegamento
- Porcelana fría teñida de verde o bien plastilina verde
- Ramitas
Con la porcelana fría o la plastilina creamos una base que sea pesada y colocamos la ramita en ella. Debemos asegurarnos de que no se caia y que sea firme puesto que le colocaremos más peso.
Con la pistola de pegamento, pega bolitas de fieltro en el extremo de la ramita y déjalas secar. Cuando se hayan secado, sigue pegando, hasta que tenga bastante volúmen y tome la forma de un árbol. Al final, pega algunas bolitas rojas para simular manzanas y habrás terminado con tu centro de mesa.